La violencia en el noviazgo afecta gravemente a mujeres jóvenes, con consecuencias psicológicas, emocionales y físicas que pueden marcar sus vidas a largo plazo.
Cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS) revelan que aproximadamente 19 millones de adolescentes han sido víctimas de algún tipo de violencia por parte de su pareja antes de cumplir 20 años. En México, la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (Endireh) indica que un 71.9% de las mujeres mayores de 15 años han experimentado violencia en algún momento de sus vidas.
La violencia psicológica: el tipo más frecuente
De acuerdo con el doctor Víctor Nodal Silva, del Centro Universitario de Ciencias de la Salud de la UdeG, la violencia psicológica es la más común en relaciones de noviazgo adolescente. Incluye prácticas como manipulación emocional, desvalorización, control, aislamiento social y vigilancia.
“La violencia psicológica es difícil de identificar porque suele confundirse con dinámicas normales dentro de la relación. Sin embargo, siempre genera malestar y dolor en la víctima, lo que puede ser una señal de alerta”, explicó Nodal Silva.
Este tipo de violencia también se manifiesta a través de insultos, menosprecio y actitudes que ignoran las necesidades emocionales de la pareja, perpetuando un ciclo de daño difícil de romper.
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Ciclo de violencia y factores que atrapan a las víctimas
Muchas adolescentes permanecen años con sus agresores debido a un ciclo de violencia escalonado. Este inicia con la manipulación y aislamiento social, seguido por agresiones más severas que la víctima termina normalizando.
“El agresor suele convencer a la víctima de que sus acciones son muestras de amor, creando una dependencia emocional que dificulta romper la relación”, afirmó Nodal Silva.
Además, la violencia en el noviazgo está estrechamente ligada al contexto familiar de las víctimas, quienes a menudo han crecido en entornos donde las conductas abusivas son comunes, dificultando la identificación de estas dinámicas como perjudiciales.
Consecuencias a largo plazo
La violencia en el noviazgo puede tener efectos devastadores, como:
- Problemas de salud mental: depresión, ansiedad y estrés postraumático.
- Aislamiento social y ruptura de vínculos familiares.
- Riesgos de salud física: embarazos no deseados e infecciones de transmisión sexual.
- Repetición del patrón de violencia en la vida adulta, incluso derivando en feminicidios.
¿Qué hacer frente a la violencia?
El doctor Nodal Silva subraya la importancia de la educación en el respeto y el amor desde el hogar para prevenir la violencia en relaciones afectivas. Además, recomienda a los padres estar atentos a cambios en el comportamiento de sus hijas y su dinámica con sus parejas.
En casos donde los adolescentes no cuenten con respaldo familiar, pueden acudir a instancias como la Red de Centros de Justicia para la Mujer o denunciar directamente al 911. Las denuncias pueden realizarse incluso sin identificación oficial, y el Estado está obligado a brindar protección y apoyo integral.
Recursos de apoyo en Jalisco
- Red de Centros de Justicia para la Mujer: Atención integral para mujeres víctimas de violencia.
- Línea de emergencia 911: Para denuncias inmediatas de violencia de género.
La violencia en el noviazgo no es un asunto privado, sino un problema social que requiere atención urgente para garantizar el bienestar y el futuro de las mujeres jóvenes.