La Corte Suprema de Estados Unidos autorizó el lunes a las autoridades de Texas a retirar las cercas de alambre de púas que habían colocado en parte de la frontera del estado con México.
La decisión, tomada por una mayoría de 5-4, se produjo en respuesta a una demanda presentada por grupos ambientalistas que argumentaban que la alambrada de púas representaba un peligro para la vida silvestre y la salud pública.
La alambrada de púas, que mide unos 150 kilómetros de longitud, fue colocada por el gobernador de Texas, Greg Abbott, en 2023. Abbott argumentó que la alambrada era necesaria para disuadir a los migrantes de cruzar la frontera ilegalmente.
Los ambientalistas, por su parte, argumentaban que la alambrada de púas representaba un peligro para la vida silvestre, ya que podría atrapar y matar a animales como coyotes, linces y aves. También argumentaban que la alambrada podría contaminar el agua subterránea.
En su decisión, la Corte Suprema reconoció que la alambrada de púas podría representar un peligro para la vida silvestre, pero sostuvo que los beneficios de la alambrada, como disuadir la migración ilegal, superaban los riesgos.
La decisión de la Corte Suprema fue recibida con satisfacción por Abbott, quien dijo que era una “victoria para la seguridad de la frontera”. Los ambientalistas, por su parte, expresaron su decepción y dijeron que apelarían la decisión.
La alambrada de púas es una de las medidas más polémicas tomadas por Abbott para frenar la inmigración ilegal. El gobernador también ha enviado a la Guardia Nacional a la frontera y ha propuesto construir un muro fronterizo.