Persiste discriminación laboral hacia la diversidad sexual en Jalisco, pese a esfuerzos oficiales

Activistas señalan que las políticas públicas son insuficientes y que la discriminación sigue siendo una barrera cotidiana para las personas LGBTQ+ en el ámbito laboral.

En el marco del mes del Orgullo, el Gobierno de Jalisco realizó el conversatorio “De la teoría a la práctica: Creando espacios inclusivos para la diversidad sexual en el trabajo”, con el objetivo de promover ambientes laborales libres de discriminación. Sin embargo, especialistas y colectivos ciudadanos advierten que este tipo de foros, aunque necesarios, no han logrado generar cambios estructurales en la realidad que enfrenta la diversidad sexual en los centros de trabajo.

De acuerdo con datos del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (CONAPRED), seis de cada diez personas en México han presenciado actos de discriminación por motivos de orientación sexual, identidad o expresión de género en sus espacios laborales. Las estadísticas revelan que la problemática es persistente y generalizada, más allá de las buenas intenciones que se expresan desde las instituciones.

Aunque autoridades como Ricardo Barbosa Ascensio, Secretario del Trabajo y Previsión Social de Jalisco, insistieron en la importancia de llevar la teoría a la práctica, activistas y expertos apuntan que la falta de mecanismos de seguimiento y sanción concreta limita el impacto de este tipo de encuentros.

“Estos foros tienen valor simbólico, pero no se traducen en un cambio tangible para las personas LGBTQ+ que siguen enfrentando acoso, despidos injustificados y barreras de acceso al empleo, especialmente para las mujeres trans”, comentó Violeta Magdalena Azcona Reyes, presidenta de la Red contra la Violencia Laboral hacia las Mujeres en Jalisco.

Según cifras compartidas durante el conversatorio, el desempleo entre mujeres trans alcanza hasta el 90 por ciento, y más del 75 por ciento de las personas LGBTQ+ no cuentan con seguridad social, lo que evidencia una precarización laboral estructural que no se resuelve con capacitaciones esporádicas ni con discursos institucionales.

Además, organizaciones sociales señalan que los esfuerzos del gobierno suelen concentrarse en espacios formales, mientras que gran parte de las personas LGBTQ+ trabajan en sectores informales donde las garantías laborales son prácticamente inexistentes.

En su intervención, Viviana Daniela Arce Corona, directora de Diversidad Sexual del Gobierno de Jalisco, insistió en la necesidad de garantizar derechos laborales de forma efectiva. No obstante, activistas como Stephanie Calvillo Barragán, profesora de Derecho Social en el ITESO, recordaron que las condiciones reales requieren más que foros conmemorativos: se necesitan inspecciones laborales, protocolos de atención efectivos y presupuesto suficiente para ejecutar políticas incluyentes de manera continua.

En entrevista con este medio, integrantes de la comunidad LGBTQ+ señalaron que la discriminación persiste incluso dentro de dependencias públicas, donde no siempre se respetan los nombres elegidos, la expresión de género o la igualdad de oportunidades para ascensos y contrataciones.

De acuerdo con el CONAPRED, una de cada tres denuncias recibidas por discriminación está relacionada con el ámbito laboral, lo que posiciona a los centros de trabajo como espacios donde la exclusión se mantiene activa.

Si bien el Gobierno de Jalisco ha reiterado su compromiso con la creación de espacios laborales inclusivos, persiste la distancia entre las políticas anunciadas y las condiciones concretas que enfrentan las personas LGBTQ+ día a día.