En medio de la creciente preocupación por las nuevas medidas migratorias impulsadas por el gobierno de Donald Trump en Estados Unidos, el senador Carlos Lomelí Bolaños expresó su rechazo a las redadas realizadas recientemente en diversas ciudades norteamericanas y manifestó su solidaridad con las personas mexicanas que han sido afectadas por estas acciones.
“El movimiento que hoy vemos en las calles de varias ciudades estadounidenses es un acto de valentía y resistencia. Es la voz de millones que exigen ser reconocidos como lo que son: trabajadores honestos y generadores de riqueza que merecen respeto”, expresó el legislador.
Lomelí también reconoció la labor de asociaciones civiles, líderes religiosos, académicos, empresarios y ciudadanos estadounidenses que han brindado apoyo y acompañamiento a los migrantes mexicanos durante este periodo de mayor hostilidad.
El senador destacó que los consulados mexicanos en Estados Unidos disponen de mecanismos de asistencia y protección para brindar orientación legal y apoyo a las personas afectadas por estas políticas. Además, mencionó que el gobierno mexicano mantiene canales diplomáticos para manifestar su desacuerdo con las acciones que criminalizan la migración.
“Hoy más que nunca es necesario defender los principios universales de los derechos humanos. Las políticas que promueven el miedo y la división no pueden tener lugar en sociedades que aspiran a la paz y la justicia”, señaló.
Organizaciones pro-migrantes y colectivos de derechos humanos han documentado un aumento en los operativos de control migratorio en Estados Unidos, lo que ha generado temor e incertidumbre entre las comunidades de origen latinoamericano.
En otro tema, el legislador hizo referencia a datos sobre la disminución de los niveles de pobreza en México. Según Lomelí, la distribución de recursos hacia los sectores más desfavorecidos ha contribuido a que millones de personas mejoren sus condiciones de vida. “México es el país con mayor reducción de pobreza en América Latina”, afirmó.
Aunque el senador destacó los avances económicos y sociales recientes, analistas y organismos internacionales continúan evaluando el impacto real de estas políticas a mediano y largo plazo.
El fenómeno migratorio, así como las condiciones económicas en ambos lados de la frontera, sigue siendo un tema prioritario para las familias mexicanas, que enfrentan no sólo los retos de movilidad internacional, sino también la necesidad de mejores oportunidades en su país de origen.
La comunidad migrante y los defensores de derechos humanos permanecen atentos a las próximas medidas que adopten las autoridades estadounidenses y mexicanas en torno a esta problemática.
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