El alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos Catalán, fue asesinado este domingo, apenas seis días después de haber tomado posesión como presidente municipal de la capital del estado de Guerrero. Su cabeza fue encontrada en el toldo de una camioneta en la colonia Villas del Roble, al oriente de Chilpancingo.
El trágico hallazgo ocurrió alrededor de las 17:00 horas, cuando vecinos reportaron la presencia de una cabeza humana sobre un vehículo estacionado en el libramiento hacia Tixtla. Al llegar al lugar, las autoridades descubrieron que el cuerpo del alcalde se encontraba en el asiento del copiloto del mismo vehículo. Este asesinato conmocionó a la población y a las autoridades locales, quienes apenas se estaban recuperando del homicidio de Francisco Tapia, secretario general del Ayuntamiento de Chilpancingo, ocurrido solo tres días antes.
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Condena del PRI
El presidente nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Alejandro Moreno, confirmó la noticia a través de sus redes sociales y expresó su dolor por la pérdida de dos jóvenes funcionarios que, según dijo, buscaban el progreso de su comunidad. Moreno también anunció que el PRI solicitará que la Fiscalía General de la República (FGR) atraiga las investigaciones de ambos homicidios.
“Han asesinado a nuestro alcalde de Chilpancingo, Alejandro Arcos, y hace apenas tres días al secretario de este mismo Ayuntamiento, Francisco Tapia. Llevaban menos de una semana en el cargo. Funcionarios jóvenes y honestos que buscaban progreso para su comunidad. Nuestro pésame y solidaridad para sus familias”, escribió Moreno en su cuenta de X (antes Twitter).
Investigación en curso
La Fiscalía General del Estado (FGE) de Guerrero emitió un comunicado informando que se ha abierto una investigación por el delito de homicidio calificado. Según la FGE, agentes de la Policía Investigadora Ministerial y los Servicios Periciales acudieron al lugar para recolectar pruebas que permitan esclarecer el asesinato.
Hasta el momento, no se ha detenido a ningún sospechoso, y las autoridades no han proporcionado detalles sobre posibles móviles del crimen. La FGE ha señalado que trabajará en conjunto con las autoridades federales para llevar a cabo una investigación exhaustiva.
Violencia en aumento
La región de Guerrero ha estado marcada por altos niveles de violencia, especialmente en los últimos años. Chilpancingo, al ser la capital del estado, no ha sido ajena a esta situación. En este contexto, la muerte de Alejandro Arcos Catalán y Francisco Tapia refleja la creciente inseguridad que afecta tanto a funcionarios públicos como a la población en general.
Ambos asesinatos han causado indignación y temor entre los ciudadanos, quienes exigen mayor seguridad y una respuesta contundente por parte de las autoridades.
Reacciones y exigencias
Diversos líderes políticos y organizaciones han expresado su condena por los hechos, pidiendo justicia para los dos funcionarios asesinados. La situación de ingobernabilidad en Guerrero ha sido señalada por varios sectores, quienes demandan una pronta intervención de las autoridades federales.
La muerte de Alejandro Arcos Catalán, quien apenas asumió el cargo el pasado lunes 30 de septiembre, ha dejado un vacío en la administración de Chilpancingo y ha puesto de manifiesto la necesidad urgente de combatir la violencia en la región. Mientras tanto, la población de la capital guerrerense se encuentra de luto y a la espera de respuestas por parte de las autoridades.