La Procuraduría Estatal de Protección al Ambiente (Proepa) ha procedido con la clausura parcial temporal de una tequilera en Atotonilco el Alto, tras recibir una denuncia popular que alertaba sobre la contaminación generada por el establecimiento. La medida de seguridad, que se implementó para prevenir daños mayores al entorno y a la salud pública, responde a una serie de irregularidades detectadas durante una inspección reciente.
El problema se centra en la descarga de vinazas, un residuo líquido generado durante la producción de tequila, que la tequilera vertía al cauce de un arroyo cercano. Esta situación había generado una significativa molestia entre los habitantes de la comunidad circundante, quienes finalmente presentaron la denuncia ante Proepa.
Durante la inspección, el personal técnico de Proepa encontró diversas irregularidades en el funcionamiento de la tequilera, tanto a nivel administrativo como operativo. Entre los problemas identificados se incluyen la falta de acreditación para el tratamiento y la disposición final de los residuos de manejo especial producidos por el establecimiento. Además, se detectaron fugas de vinaza desde los tanques elevados utilizados para su almacenamiento temporal. Estas fugas no solo afectaron el interior de las instalaciones, sino que también se derramaron al exterior, desembocando en una barranca y posteriormente en el arroyo cercano, exacerbando el problema de contaminación.
La Proepa decidió actuar de manera inmediata para evitar mayores daños a los recursos naturales y a la salud pública. La clausura parcial temporal se llevó a cabo con base en el artículo 144, fracción I de la Ley Estatal del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente (LEEEPA) y el artículo 85, fracción III de la Ley de Gestión Integral de los Residuos del Estado de Jalisco. Se colocaron sellos de clausura en uno de los alambiques utilizados en el proceso de producción de tequila, como una medida para reducir los volúmenes de vinaza generados y prevenir futuros derrames.
El responsable del establecimiento también recibió instrucciones para implementar de manera urgente las medidas necesarias para controlar la fuga de vinazas y evitar su escurrimiento hacia el exterior de las instalaciones. La Proepa ha establecido que la clausura permanecerá en vigor hasta que se cumplan todos los requisitos dictados por la autoridad ambiental para el adecuado tratamiento de los residuos.
Esta acción subraya el compromiso de Proepa con la protección del medio ambiente y la salud pública, reafirmando la importancia de que las empresas cumplan con las normativas ambientales vigentes. La Proepa continúa vigilante para garantizar que las empresas operen dentro del marco legal y tomen las medidas necesarias para mitigar cualquier impacto negativo en su entorno.