En una destacada operación conjunta, las autoridades mexicanas lograron localizar con vida a los 31 migrantes que habían sido secuestrados el pasado fin de semana en el estado de Tamaulipas, según informó el gobierno el miércoles. Jesús Ramírez, coordinador general de comunicación social de la Presidencia, anunció la exitosa operación a través de su cuenta en la red social X (anteriormente Twitter), detallando que los migrantes ya se encuentran bajo resguardo de las autoridades.
El operativo de rescate fue llevado a cabo en colaboración entre la Fiscalía General de Tamaulipas, el Ejército, la Guardia Nacional y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana. Jesús Ramírez compartió imágenes en su cuenta de redes sociales que mostraban a los migrantes rescatados, incluyendo niños, dentro de un autobús, resguardados por agentes de las fuerzas de seguridad.
El lugar del rescate fue identificado en el municipio fronterizo de Río Bravo, según informó el vocero de la Secretaría de Seguridad de Tamaulipas, Jorge Cuéllar, a la televisora local Milenio. Aunque aún se encuentran en las fases iniciales de la investigación, se espera obtener más detalles a medida que los migrantes rindan declaraciones ante las autoridades.
La canciller mexicana, Alicia Bárcena, se pronunció sobre el incidente, destacando que la Secretaría de Relaciones Exteriores mantiene comunicación con los países de origen de los migrantes para brindar seguimiento y apoyo integral en cada caso. El presidente de Colombia, Gustavo Petro, confirmó la víspera que entre los secuestrados hay cuatro colombianos.
Los migrantes fueron víctimas de un secuestro perpetrado por un grupo de hombres armados el 30 de diciembre mientras se trasladaban en un autobús de la empresa privada SENDA por la autopista que comunica Reynosa y Matamoros en el estado de Tamaulipas, informó la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez.
Según los detalles proporcionados por Rodríguez, los presuntos delincuentes obligaron a los 36 pasajeros a bajarse del autobús y se llevaron en cinco vehículos a 31 personas provenientes de Ecuador, Colombia, Venezuela, Honduras y México. Como parte de las investigaciones en curso, las autoridades llevaron a cabo seguimientos de teléfonos, revisaron videos del autobús y realizaron un rastreo en la ruta con el apoyo de helicópteros.
El autobús, que partió de Monterrey, capital del estado de Nuevo León, con destino final en Matamoros, fue interceptado cerca de Río Bravo, una región donde opera una facción del cartel del Golfo conocida como “Los Escorpiones”. A pesar de la violencia que prevalece en la región, las autoridades calificaron el secuestro masivo como “atípico”, subrayando la importancia de una pronta y exitosa intervención.
Este incidente resalta los riesgos y desafíos que enfrentan los migrantes en su travesía, así como la necesidad de esfuerzos continuos para garantizar su seguridad y protección en la región. La cooperación internacional y la colaboración entre distintas agencias gubernamentales son fundamentales para abordar estos problemas y enfrentar las complejidades del tráfico de personas en la frontera norte de México.
