En el transcurso de dos años de la administración de Pablo Lemus en Guadalajara, la ciudad ha sido tildada como un epicentro de corrupción y despilfarro, según denunció el Dr. Carlos Lomelí Bolaños. En una exposición, el Coordinador de los Regidores de Morena presentó una serie de datos alarmantes que pintan un panorama sombrío de la gestión gubernamental.
En sus declaraciones, Lomelí Bolaños no escatimó en señalar numerosos ejemplos de supuestas prácticas corruptas y malgasto de recursos. Cifró en al menos 2,134 millones de pesos los fondos públicos que se habrían dilapidado en proyectos innecesarios, compras infladas y servicios públicos que no cumplen con los estándares adecuados.
El líder de Morena criticó duramente al gobierno tapatío, calificándolo como una “máquina permanente de corrupción, de caprichos personales y de impunidad”. Lomelí Bolaños puso de manifiesto gastos extravagantes, como los 26 millones de pesos destinados a un carrusel, 40.2 millones para el monumento de El Palomar, y 29 millones pagados a la empresa española Sulo por la recolección de basura en los “puntos limpios”.
Además de los gastos extravagantes, el Dr. Lomelí Bolaños también reveló supuestas compras a sobreprecio, como patrullas por 300 millones de pesos y la construcción del C5. También mencionó ejemplos más llamativos, como el costoso baño personal del alcalde, valorado en 350 mil pesos. Añadió que la falta de transparencia en gastos, como publicidad o seguros poco claros, agrega a la percepción de ineficiencia.
Sin embargo, no solo se señalan excesos en el gasto; también se destaca la falta de cumplimiento en promesas. El incremento salarial prometido al personal de la Comisaría de Seguridad Pública aún no ha sido concedido, a pesar de las expectativas iniciales.
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La deuda pública
La administración de Lemus también se ve afectada por el manejo de la deuda pública. Guadalajara se encuentra en el cuarto lugar a nivel nacional en cuanto a la deuda pública, según el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO). Esta preocupante posición la sitúa solo por detrás de Tijuana, Hermosillo y Monterrey.
Lomelí Bolaños también se refirió a la inversión en instituciones bancarias de bajo calibre, lo que resultó en la pérdida de 302 millones de pesos. Además, destacó la falta de transparencia en los procesos de licitación y la aparente falta de seguimiento a las denuncias presentadas ante la Contraloría Ciudadana.
En resumen, el gobierno de Pablo Lemus en Guadalajara ha sido acusado de mala administración financiera, corrupción y prácticas poco éticas. Las acusaciones del Dr. Carlos Lomelí Bolaños arrojan una sombra sobre la administración actual y plantean preguntas sobre la verdadera prioridad en el uso de los recursos públicos.
