En una audaz y significativa movida, la diputada María Padilla Romo del partido Morena ha presentado un exhorto al poder Ejecutivo del Estado de Jalisco para agregar un componente crucial en el proceso de elección del próximo titular de la Comisión de Búsqueda de Personas: una entrevista con los colectivos de las familias de personas desaparecidas.
La iniciativa surge después de que el gobierno estatal publicara la convocatoria para el cargo el 9 de agosto. A pesar de que previamente se compartió la convocatoria con los colectivos de familias en búsqueda de sus seres queridos para recibir observaciones y comentarios, estas sugerencias no fueron atendidas al publicarse la convocatoria final.
La diputada Padilla Romo destaca la importancia de asegurar la participación activa de las familias afectadas en el proceso de selección. Según sus palabras, “Lo que debería ser un irreductible es que si o si las familias de las personas desaparecidas sean protagonistas en la valoración y escrutinio de los perfiles que se postulan para el cargo.” Hasta ahora, el gobierno de Jalisco había establecido la inclusión de tres familiares de personas desaparecidas en un “Comité de Revisión y Análisis de las Propuestas” para evaluar la documentación de los aspirantes. Sin embargo, la diputada resalta que es crucial llevar a cabo entrevistas con los aspirantes para obtener una comprensión más profunda de sus enfoques y experiencias.
Padilla Romo insiste en que esta entrevista no es un examen oral, sino una oportunidad para una interacción significativa que permita discernir la aptitud y la empatía del aspirante hacia el problema. Además, destaca que esta entrevista no es vinculante y no contradice lo establecido en la convocatoria original. Sugiere que se podría destinar un período de tiempo específico para llevar a cabo estas entrevistas, sin violar disposiciones legales o constitucionales.
La diputada también desafía la norma establecida, planteando una pregunta provocadora: ¿Por qué no permitir que los colectivos elijan al próximo titular? Aunque comprende que la elección está regulada por un dispositivo legal, sugiere que podría ser valioso considerar la posibilidad de que el “gran elector” elija a alguien sugerido por los colectivos, lo que podría marcar un giro histórico en el proceso de selección.
Este exhorto plantea un debate necesario y enfoca la atención en las voces que a menudo quedan en segundo plano. En un tema tan delicado como la búsqueda de personas desaparecidas, la participación activa y la inclusión de los colectivos de familias podría marcar la diferencia en el abordaje de esta problemática. El llamado de la diputada María Padilla Romo aporta una nueva perspectiva y subraya la importancia de considerar las voces de quienes más han sufrido por esta crisis.
