En una acción coordinada, el personal de la Comandancia de Mandamientos Judiciales de la Fiscalía del Estado (FE) logró la detención de Jonathan Rafael S., de 29 años de edad, por su probable relación en el delito de maltrato infantil y lesiones calificadas en agravio de una niña de 11 años de edad.
Por la Redacción
Las investigaciones revelaron que Jonathan Rafael S. era el encargado de un centro de rehabilitación ubicado en la colonia Santa Isabel, en el municipio de Tonalá, donde la víctima se encontraba recluida.
Durante el mes de julio del 2022, la menor habría sido sometida a terribles actos de violencia, presuntamente fue rociada con alcohol y sometida a descargas eléctricas como método disciplinario, lo que le ocasionó quemaduras en diversas partes de su cuerpo.
El caso fue denunciado ante un agente del Ministerio Público, quien realizó una serie de actos de investigación diligentes que llevaron a la identificación del presunto responsable. Con base en la evidencia recabada, se solicitó una orden de aprehensión.
La detención de Jonathan Rafael S. tuvo lugar en las inmediaciones de la Zona Industrial de Guadalajara y posteriormente fue puesto a disposición del Juez Segundo de Control Especializado en Materia Penal del Primer Distrito Judicial del Estado de Jalisco. Este juez será quien defina su situación legal en los próximos días.
Es importante mencionar que la persona señalada en el presente comunicado fue asegurada conforme a los protocolos establecidos, donde se le realizó la lectura de sus garantías constitucionales, y se le presume inocente durante todas las etapas del procedimiento judicial hasta que no se le dicte una sentencia condenatoria por parte de una autoridad judicial.
La Fiscalía del Estado seguirá trabajando en este caso y otros similares para garantizar que los responsables de cometer delitos en contra de menores de edad enfrenten la justicia y reciban la sanción que corresponde.
Se hace un llamado a la sociedad a denunciar cualquier acto de violencia o maltrato infantil y a proteger a los niños y niñas, quienes merecen crecer en un ambiente seguro y libre de violencia. La colaboración ciudadana es fundamental para garantizar el bienestar de los más vulnerables.