Por SALOMÓN GONZÁLEZ
Con buenas hechuras se mostraron en el lienzo los compadres de Jalisco que triunfaron a domicilio 343, en el encuentro contra charros de Jalisco con 295 puntos. Un mano a mano intenso con el que arranca el de mayo, con competencias infantiles, juveniles, y de equipos grandes.
Inspirados en el Lienzo Charro Jalisco, sede de los 12 veces campeones nacionales Charros de Jalisco, se presentaron calas, piales, coleadero, buenas montas de toro y yegua, terna en el ruedo (lazo a la cabeza del toro y pial en el ruedo), manganas a pie y a caballo, para finalizar con el escalofriante paso de la muerte.
Verdaderas hazañas se vivieron este fin de semana, con una buena charreada en tierras tapatías, en una fiesta que disfrutó la gran afición de nuestro deporte nacional por excelencia.
La competición de buen nivel deportivo con ganado ejemplar, hicieron posible disfrutar ejecuciones sus suertes con gallardía, dignidad, talento, respeto y orgullo, sin desperdicio en cada accionar, virtuosos en el manejo de la reata de ixtle, y en muchas ocasiones viniendo de atrás para remontar marcador y asirse de puntajes para alcanzar la victoria.
Los jueces fueron Jaime Muñoz y Francisco Limón, los locutores Roberto Carranza, así como Juan Bobadilla (el astilla), y quedó de manifiesto la gran organización que encabeza Salvador Sánchez, Presidente de la centenaria asociación, así como Javier Sánchez, integrante de la Mesa Directiva de la Federación Mexicana de Charrería.
El deporte es hoy día un fenómeno de extraordinaria importancia social, por lo tanto, la práctica de la charrería forma parte importante de los centenarios Charros de Jalisco, a través de la participación de la familia y amigos.
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Breviario cultural de charrería
El origen de la charrería se remonta a las actividades del campo mexicano, creció paulatinamente al generalizarse el uso de los caballos entre los habitantes de nuestro país, donde los hacendados y sus servidores de confianza hacían gala de su pericia y destreza en el manejo de los animales, consumando útiles y valiosas maniobras con arrojo y valentía. Más tarde se extendió por toda la Nueva España y floreciendo en el Virreinato de la Nueva Galicia, actual Estado de Jalisco y sus alrededores.
Según está registrado por la Federación Mexicana de Charrería, en 1880 surgió la charrería profesional, fue entonces cuando apareció el famoso “Charro Ponciano”, cuyas hazañas se inmortalizaron en corridos y canciones.
El 14 de septiembre de 1920, se reúnen los amigos y sentaron precedente, fue don Ignacio F. Sahagún el primer presidente de la centenaria asociación con 101 años de historia, 12 veces campeones nacionales, empezando con el primer triunfo en 1958.
Antes que concluyera la década de la años cuarenta, el mandatario estatal don Silvano Barba González, otorgó un terreno para edificar la catedral de la charrería, querencia de los afamados “bigotones”, siendo don Andrés Z. Barba quien hace realidad esta proeza que ha sido un referente nacional.
La charrería está relacionada con la sastrería, sombrerería, platería, zapatería, fustería, talabartería, curtiduría, fabricación de sarapes, elaboración de reatas, herrajes, bordados y trabajos en pita. La charrería fue declarada ‘Deporte Nacional’ por el entonces presidente de la República, Manuel Ávila Camacho, e instituida el 14 de septiembre como Día del Charro.
Con las faenas en el lienzo y más cuitas por contar nos encontramos, y que el Supremo Caporal reparta suerte.
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