POR IVÁN ALATORRE OROZCO
Durante el rocío gélido de esa mañana
comprendió como el cristal empañado
había distorsionado la realidad,
la congruencia,
la velocidad
y la belleza
de un mundo que lo esperaba
con los brazos abiertos.
POR IVÁN ALATORRE OROZCO
Durante el rocío gélido de esa mañana
comprendió como el cristal empañado
había distorsionado la realidad,
la congruencia,
la velocidad
y la belleza
de un mundo que lo esperaba
con los brazos abiertos.
Columna del Director Después de un largo tiempo de no escribir, inicio esta nueva etapa, ...