LA OPINIÓN DEL DIRECTOR
No hay sufrimiento más intenso que el perder a un ser amado en este mundo, la perdida de la madre de uno de mis mejores amigos, compañero y guía, me recordó este fin de semana, lo vulnerable que son las vidas de los seres humanos, sin importar cuanto los amemos y el insustituible vacío que dejan en nuestros corazones.
Así es, estimados lectores, los colaboradores de Minerva Multimedios estamos de luto, por el fallecimiento de la Señora Elvira Ogazón Bautista, madre de nuestro asesor Víctor Manuel Chávez Ogazón, quien además perdió a su padre el Señor José Guadalupe Chávez Calderón a principios del mes de abril de este mismo año.
Nuestra solidaridad absoluta para Víctor Manuel, quien se ha distinguido siempre por ser una extraordinaria persona, un amigo leal, un padre excepcional, además de ser un icono en el periodismo jalisciense y nacional.
Entendemos lo difícil que será reponerse de estas dos importantes ausencias, porque cuando a un ser querido le embarga la tristeza, lo sentimos todos y se vuelve muy complicado superarlo, no ignoramos que la razón nos dice que debemos de mantenernos estoicos para apoyarlo, pero siendo honestos también sentimos nuestro ánimo quebrantado.
Es innegable, que nuestra estancia en este planeta es pasajera, pero cuando alguien imprescindible en nuestras vidas fallece y entendemos que nunca más podremos convivir o compartir nuestros sentimientos, tiempo y actividades, se vuelve casi insuperable.
Si una muerte de un ser amado de las denominadas “naturales” es profundamente dolorosa, imagínense a esos miles de mexicanos que han perdido a un familiar o amigo porque “desapareció”, fue asesinado o murió porque las políticas y recursos públicos para la salud de la población son insuficientes.
Los individuos debemos de contribuir desde cualquiera que sea nuestra trinchera, para disminuir la tragedia de seguir perdiendo a más connacionales, ya sea por la inseguridad pública o por la falta de servicios de salud adecuados para los habitantes de este país.
Los ciudadanos somos los principales responsables de lo que acontece en ambos rubros, recordemos que nosotros elegimos a los gobernantes en turno, lo cual también nos obliga a reflexionar bastante sobre a quién le concedemos nuestro voto.
Esos funcionarios que hoy nos gobiernan son los responsables de proporcionarnos la seguridad pública que tanto anhelamos los mexicanos, de emitir políticas de salud y de asignar recursos para atender la salud de la sociedad, pero esos servicios aún estamos distantes de obtenerlos apropiadamente.
La vida solo la tendremos una sola vez, si no se le da la importancia que tiene, se continuara enlutando a muchas familias, quienes lamentablemente experimentaran el sufrimiento por la ausencia de sus seres amados.
Empecemos por elegir a nuestras autoridades con un voto razonado, con una formación de valores para nuestros hijos, con hacerlo lo posible para evitar que nuestros familiares sean víctimas de las adicciones o realicen actividades ilícitas, con exigir nuestros derechos cuando sean vulnerados y con ser más solidarios con nuestros semejantes cuando sean víctimas de alguna injusticia.
¡México es de todos!… ¡Estamos obligados a mejorar sus condiciones para alcanzar un mejor nivel de vida para todos los que lo habitamos y para aquellos que lo harán en un futuro!
Email: victor@minervamultimedios.com
