POR ANTONIO VALLADARES
El bailarín tapatío Isaac Hernández, de la mano del ruso Mikhail Baryshnikov, legendario bailarín y actor de esa memorable película de Noches de Sol, triunfa en Roma, Italia. Se presentó tres días con una nueva versión de ballet de El Quijote.
Quien no recuerda a Baryshnikov en esa película que narra como un vuelo de Londres a Tokio se convierte en una pesadilla para uno de los grandes bailarines de ballet del mundo, que desertó hace diez años de la Unión Soviética. El avión tiene que hacer un aterrizaje de emergencia en Siberia y ahí queda atrapado.
Hoy, este ícono y una eminencia en la historia del ballet mundial. Dirige al tapatío Isaac Hernández, en otro de sus grandes triunfos. Se presentó los días 15, 16 y hoy, 17 de noviembre, con gran éxito en Roma, invitado como bailarín principal de la compañía Ópera de Roma.
El mexicano, quien es bailarín principal del English National Ballet en Inglaterra, estuvo trabajando durante varios días con Baryshnikov, puliendo al máximo la puesta en escena de esta nueva producción de Don Quijote, en la cual interpretó el papel principal de Basilio, un personaje que lleva “muy dentro y cerca de su persona”, afirma Isaac Hernández, quien estuvo compartiendo el escenario con la estrella ucraniana Iana Salenko (bailarina principal del Berlin State Ballet y del Royal Ballet de Inglaterra) y quien interpreta en el papel de Kitri en la puesta en escena.
“Ha sido una experiencia memorable. Mikhail Baryshnikov es un artista que me inspira profundamente. Me contagia una energía que sólo las grandes estrellas tienen y está ansioso por compartir su conocimiento; eso fue lo más especial. Después de la función me felicitó y se quedó conmigo, cuando todos se fueron, aconsejándome para ayudarme a crecer más mi papel. Me ha hecho muy feliz vivir esta experiencia. Es algo que me acompañará por el resto de mi vida. Algo que también ha sido muy especial para mí, es que mis padres pudieron acompañarme esta noche tan importante en mi carrera”, afirmó el bailarín mexicano.
Esta nueva versión de Don Quijote, inspirada en la que fue creada originalmente por Baryshnikov en 1984 para el American Ballet Theatre, se adaptó exclusivamente para la Ópera de Roma en colaboración con el prestigioso coreógrafo francés Laurent Hilaire, quien fuera bailarín principal de la Ópera de París por veintidós años y considerado uno de los bailarines franceses más importantes de las últimas dos décadas.
Esta obra contó también con la colaboración del eminente director de orquesta inglés David Garforth y del caricaturista ruso Vladimir Radunsky, encargado de desarrollar los vestuarios y escenografía que le dan un aire de frescura y renovación a este histórico ballet, lo que permite a los artistas interpretar a los personajes de una forma novedosa, nunca antes vista, visualizada por la insigne creatividad de Baryshnikov, quien es distinguido junto con Rudolf Nureyev como los mejores exponentes en la historia del ballet mundial.
La participación de Isaac Hernández con la Ópera de Roma significó para el mexicano la primera vez que pisa un escenario en Italia y un doble sueño hecho realidad, el de colaborar directamente con Baryshnikov, una legendaria figura a quien admira desde pequeño. Además, el presentarse en uno de los recintos más prestigiosos del ballet en Italia, conquistando así un nuevo escenario y que mejor, haberlo hecho de la mano de una leyenda viviente de la historia del ballet. Un privilegio que pocos artistas tienen a lo largo de su carrera.
Entre los espectadores de la función inaugural destacó la presencia de la alcaldesa de Roma, Virgina Ragi.
Isaac sumó así a su destacada trayectoria internacional un logro más, después de haber sido el primer mexicano que se presenta como bailarín principal en la Ópera de París, con el Mariinsky Ballet de San Petersburgo (Rusia), en el teatro Bolshoi de Moscú y el Royal Opera House de Londres. Logros sin precedentes para un bailarín en la historia de nuestro país, que lo posicionan en la actualidad como uno de los bailarines más importantes de la escena internacional y en la plenitud de su carrera artística.