Nadie sobrevivió al ataque del 16 de septiembre del 2016 en fiscalía general. Este domingo murió la cuarta víctima y hasta ahora única sobreviviente del Araceli Bautista Rocha.
La fiscalía confirmó su deceso a causa de las lesiones ocasionadas entonces. Su deceso no entra dentro de la categoría del homicidio, debido a que no ocurrió durante los 90 días siguientes a la agresión.
Apenas hace una semana, el fiscal Eduardo Almaguer Ramírez había manifestado que se encontraba recibiendo terapias de rehabilitación, aunque en ese entonces no confirmó que ya hubiera sido dada de alta.
La trabajadora social herida de bala en aquel trágico hecho dejó de existir el domingo por la tarde, confirmó la dirección de Comunicación Social, aunque no se dieron a conocer más detalles.
El gobernador de Jalisco, Jorge Aristóteles Sandoval, mediante dos mensajes en Twitter extendió sus condolencias a los familiares.
Como se dio a conocer en su momento, el14 de septiembre del 2016, un gestor de nombre Homero Águila, con el alias que él mismo se puso de “El General Águila”, entró a las instalaciones con dos pistolas.
Nadie lo detectó y sin mediar palabra, disparó contra tres trabajadoras sociales y una Ministerio Público, a todas les acertó un disparó en el cráneo. Tras esa acción fue abatido por los agentes investigadores que ahí se encontraban.
En el lugar murió la trabajadora social María Verónica García Carmona, en tanto que Laura Castañeda Amaral -la agente ministerial- y Araceli Bautista Rocha fueron ingresadas al hospital Real San José fue, mientras que a Elizabeth Flores Sánchez la canalizaron a la Clínica 46 del Seguro Social.
El 16 de septiembre de 2016, es decir dos días después de la agresión, feneció Castañeda Amaral, asimismo el 27 del mismo mes también dejó de existir Elizabeth Flores Sánchez.
Lo anterior le costó el trabajo al entonces fiscal central Rafael Castellanos y otros funcionarios de fiscalía, en lo que fue calificada como una decisión injusta ya que fue el mismo fiscal Eduardo Almaguer quien ordenó en su momento retirar la vigilancia de la puerta principal de ese edificio.