*EL “OJO POR OJO” SE APLICA EN JALISCO
*SURGE GRUPO QUE SE HACE JUSTICIA POR PROPIA MANO
*AUTORIDADES INCAPACES!
ANTONIO VALLADARES
Un grupo que se autodenomina Grupo Élite Anti Ratas levantó a siete personas, las sometió a torturas, mató a uno de ellos a golpes y a los otros seis les amputó sus manos, seis pares, 12 manos, que quedaron dentro de dos bolsas de plástico, muy cerca de donde los dejaron abandonados, con improvisados torniquetes hechos con alambre y las heridas cubiertas con bolsas de plástico.
Se trata de seis hombres y una mujer.
Un mensaje en una cartulina advierte de que les hicieron eso por ladrones. La fiscalía general confirmó más tarde que todos ellos tienen antecedentes por robo de vehículos, de autopartes, a persona y a negocio.
Minervamultimedios.Com confirmó que todos fueron privados de su libertad el fin de semana pasado en puntos muy distantes, aunque coincidentes, muy retirados de lo que es su domicilio.
Araceli de 44 años y su esposo, que fue el que falleció, Rafael de 39 años, viven por la calle Aldama, en el sector Reforma, pero los privaron de su libertad en el cruce de las avenidas 8 de Julio y Patria. Lo mismo que a Osvaldo, de 30, a quien le amputaron ambas manos.
Rigoberto de 43 y José Luis de 34, fueron privados de su libertad en Juan de la Barrera y Periférico.
Christoper de 25 fue privado de su libertad en Gigantes, entre la 48 y la 50, e Ismael de 35 de la zona de Obregón.
Al final, todos fueron torturados -dicen- en una finca en Guadalajara, llevados hasta las afueras de un casino de fiestas, en Periférico Sur y la calle Oro Grande, en la colonia Solidaridad, en San Pedro Tlaquepaque, donde los dejaron, a uno ya sin vida y el resto con las manos amputadas.
Así mismo a todos les marcaron con objetos punzocortantes y marcadores, leyendas como “soy ratero” en frente y brazos, otros estaban semidesnudos, amordazados y atados de pies. Solamente uno de ellos carecía de signos vitales, pero éste no presentaba amputación de extremidades, sólo golpes en la cara y probables fracturas.
En el lugar fueron abandonadas las manos en dos bolsas de plástico –una color negro y otra beige- además de que se localizó una cartulina de color verde fluorescente, en la que se menciona el supuesto motivo por el que fueron cercenados. El mensaje fue firmado por quienes se autodenominan Grupo Elite Antiratas.
Eduardo Palacios, segundo comandante de la policía de Tlaquepaque, señaló que a su llegada no localizaron testigos por lo que fue posible recabar información de quiénes los abandonaron en ese lugar: “no comentan nada, ya que estaban como traumados (…) aquí nadie dio información de nada, incluso no había nadie cuando nosotros llegamos”, indicó además que no se tiene detectada ninguna cámara de vigilancia en la zona.
El grupo amenaza con volver a actuar y afirma que irá tras grupos dedicados al robo de carros, de motos, cadenas, celulares, los llamados conejeros y ladrones de casas habitación.
A sus víctimas las acusa de no respetar mujeres ni menores de edad y los acusa incluso de homicidio.