AGENCIAS/SAN FRANCISCO, CALIFORNIA, EU
El equipo defensivo de los Broncos de Denver y su mariscal de campo Peyton Manning, fueron la diferencia en el Súper Bowl 50 donde derrotaron 24-10 a las Panteras de Carolina, para conseguir el tercer título en su historia. La despedida de su comandante hoy está en duda.
Dejó la decisión para otro momento, se dijo dispuesto a celebrar este triunfo.
Peyton fue la experiencia contra la novatez y el nerviosismo del mariscal de campo de las Panteras, Cam Newton.
Desde la primer ofensiva, aunque terminó solo en tres puntos, los Broncos mostraron su superioridad.
Las Panteras de Carolina, en tan sólo su segunda ofensiva del partido, regalaron la anotación a Denver, tras un balón suelto de Cam Newton provocado por Von Miller, que Malik Jackson recuperó en las diagonales.
Newton, en dos escapadas y un pase a Olsen, llegó hasta territorio de Denver. Entonces, un castigo a Aqib Talib, el mejor esquinero de Broncos, los dejó a dos yardas de touchdown.
Fue Jonathan Stewart fue el encargado de llevar el ovoide a territorio prometido de Panteras, para cerrar el juego a tres puntos 10-7; sin embargo, Carolina ya no anotó hasta el último cuarto.
Denver fue ampliando su ventaja a base de goles de campo y no encontraron respuesta de Carolina, que ante la desventaja cometió costosos errores como balones sueltos e intercepciones.
En el último cuarto, parecía que Panteras despertaría cuando recortaron 10-16 la ventaja de Denver; pero otro error costoso de Newton, dejó a los Broncos a las puertas de la anotación.
C.J. Anderson fue el encargado de meterse a las diagonales, y Broncos convirtieron los dos puntos para sellar la victoria 24-10 contra Panteras.