AGENCIAS/CHINA
Suman ya 50 personas muertas y 700 heridas, a causa de las explosiones ocurridas en la localidad de Tiajin, en China. Todavía hay muchas dudas en cuanto a la causa de estos dos siniestros ocurridos por la noche en ese país y cuyas imágenes poco a poco han empezado a trascender más allá de su muralla.
Las explosiones se dieron en una zona de embarque de contenedores de una empresa de logística, donde estaban almacenadas varias toneladas de sustancias volátiles.
Se dijo que la primer explosión tuvo una equivalencia a la detonación de tres toneladas de TNT y la segunda con una intensidad de 20 toneladas.
La onda expansiva alcanzó a edificios e inmuebles, situados a kilómetros del lugar, los que sufrieron diversos daños, mínimo la ruptura de sus ventanas.
El escenario es dantesco. Automóviles quemados, flotillas enteras, personas atrapadas en algunos inmuebles, con quemaduras y heridas por los cristales.
Una carga de explosivos almacenada habría sido la causa de este siniestro. Se dijo que en ese lugar se almacenan objetos peligrosos y fuera de norma, con complicidad de inspectores corruptos.
